Al ser manipulados y modificados
genéticamente en busca de mayores beneficios, en fin, la mano del hombre
está en casi todo aunque casi nunca nos lo plateemos, durante muchos
años los científicos han trabajado para alterar muchas de las frutas y
verduras que hoy nos comemos y lograr que tengan un aspecto
completamente distinto al suyo original.
Los productos que conocemos hoy en día no eran para nada así, sino
que están modificados genéticamente en su ADN para que tengan un aspecto
más sabroso, duren más tiempo en las casas, tengan mayor resistencia a
los pesticidas, creación de nuevos alimentos y se comercialicen con
mayor facilidad. Te mostramos el antes y el después de algunos alimentos
que comes habitualmente y no teníamos ni idea de su aspecto original.
Berenjena
Fresa
Maíz
Remolacha
Sandía
Zanahoria